domingo, 18 de octubre de 2009

Tell me just what happen

Nunca me gustó Orfeo y ahora el padre paga por el hijo. Si hubiera sido hace eones, a buen seguro que hubiera prestado más atención a mis sueños. Pero James Hunter, descubierto a mis orejotas de madera por el angelote de mi hombro, sólo me deja ahora, a media tarde, sonreirme para mi y rogar por el velatorio de Vess que descansa en el armario. Me señalas "no hay mucho más fosco que Gaiman" y yo sonrío "¿Fosco? Esto es delicioso". Pero tu ya lo sabías. Y yo no, yo lo aprendo todo muy tarde. Yo no tengo un coeficiente de 130 como tu; de echo, nunca me preguntó nadie por él ni creo haber tenido uno. Y este señor, Hunter, que no canta en los años 50 sino el año pasado, me vuelve a provocar un ¿y qué más da? Y levanto una ceja, entorno los ojos sobre mi cigarrillo , como lo hacía CGB Spender y sonrío para mi. "Viene mi madre", dices. Expulso el humo, lento, no hay humo sin fuego, te miro."Déjala. Que venga."

1 comentario:

Jailai!