lunes, 16 de septiembre de 2013

La mano roja



Aquella tierra que veis puede ser vuestra.
Es verde y brillante y oscura y envuelta en penumbras, lluvias y oscuridad la mayor parte de vuestro tiempo sobre ella. Es una gema pulida en su superficie, ruda y cortante a poco que mireis bajo su manto. Aquella tierra es, dicen, una de las más deseadas por los hombres de esta era, por los gigantes del Primer Tiempo, por los Dioses de las primeras sombras.
Aún más deseada y combatida y destrozada y masacrada y aniquilada que cualquiera en oriente u occidente qu podais pensar. El borde del mundo conocido por Julio Cesar, esa será vuestra tierra.
Será rey de aquella tierra arrancada al mar el primero de vosotros que llegue primero.

Y diciéndo esto Milesius, hijo de Breogán, uno de sus tres hijos se cercenó la mano derecha y la lanzó, por encima de la cabeza de sus hermanos y su padre hasta dar en tierra.

"Ulster, en el norte, es el reino del valor en la batalla, de la bravura y el orgullo. Los hombres del Ulster son los más feroces guerreros de Irlanda, y las reinas y diosas del Ulster son protectoras de la guerra y la muerte"


Seré reina en país de batallas, seré diosa en tierra de guerreros.
Reinaré, pues, de ahora en adelante y para siempre, en el país de la mano roja.